Habían pasado ya tres meses;no puedo decir que me acordaba de él todos los días,pero sí había aún algo en mí que era de él.Volverle a ver,después de tanto tiempo me hizo rebuscar entre mí sacando que todavía no había podido olvidar esos ocho meses que habáimos vivído juntos.
Entonces es cuando empezarón las rayadas que no me llevaban a ningun otro lado que no fuése confusión.
Pero un día percibí,que probablemente a él también le estaba ocurriendo lo mísmo. Y no me equiboqué. Al poco tiempo,me dijo lo que durante tanto tiempo estuve esperando, me dijoo lo que amí exactamente me pasaba...